El oficialismo logró blindar el veto de Milei a la ley de aumento jubilatorio
- Nacionales
- 20 ago
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Con una votación ajustada y marcada por fuertes cruces políticos, la Cámara de Diputados no alcanzó los dos tercios necesarios para insistir con la ley que otorgaba un aumento del 7,2% en los haberes previsionales y ampliaba el bono excepcional para jubilados de la mínima a 110 mil pesos. De este modo, el Gobierno consiguió blindar el veto del presidente Javier Milei y preservar el ajuste fiscal que considera clave para su programa económico.
La oposición, que había logrado media sanción de la norma a comienzos de junio, reunió 160 votos a favor de rechazar el veto, contra 83 que lo respaldaron y 6 abstenciones. Si bien fue una mayoría significativa, no alcanzó para torcer el rumbo y la decisión presidencial quedó firme.
Tensiones y acusaciones cruzadas
El debate estuvo cargado de acusaciones de “traiciones” y advertencias sobre los efectos económicos y sociales de la medida. Desde el Frente de Izquierda, Vilma Ripoll llamó a “quebrar este veto indigno” y su compañero Alejandro Vilca sostuvo que la ley era “un paliativo” pero necesario para defender una jubilación digna.
En la misma línea, el jefe de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, aseguró que el ajuste impulsado por Milei “es intolerable” y subrayó que su espacio siempre estuvo dispuesto a una recomposición responsable para los jubilados.
Más duro fue Pablo Juliano, jefe de bloque de Democracia para Siempre, quien cuestionó a los legisladores que cambiaron su postura respecto de la media sanción. “Si traicionás a los jubilados que no pueden llegar a fin de mes, no sos digno de estar sentado en estas bancas”, lanzó en un encendido discurso.
Desde el MID, Eduardo Falcone ratificó que existen “fuentes alternativas de financiamiento” para sostener la ley y respaldó la iniciativa opositora.
La defensa oficialista
En contraste, el oficialismo y sus aliados cerraron filas detrás de Milei. La diputada del PRO Silvana Giudici sostuvo que la oposición pretende “tirar por la borda el esfuerzo que se le ha pedido a los argentinos en estos 22 meses” y que con esta ley “se busca volver al pasado”.
El catamarqueño Francisco Monti (Liga del Interior-LLA) afirmó que la medida era “demagógica” y que lo importante es sostener el programa fiscal como “ancla” del plan de estabilización.
En la misma línea, el libertario mendocino Álvaro González advirtió que la norma escondía una “trampa” al aumentar el gasto sin fuentes claras de financiamiento. “Buscan pan para hoy y hambre para mañana”, resumió.
Sospechas de presión política
El jefe de Unión por la Patria, Germán Martínez, acusó al Gobierno de presionar a gobernadores para que alineen a sus diputados y sostuvo que algunos legisladores “miraron para otro lado” pese a haber votado la media sanción semanas atrás.
“Se habla de prebendas y de negociaciones por fuera del recinto. Les pedimos ser serios y responsables. Defender a los jubilados debería estar por encima de cualquier cálculo político”, reclamó el santafesino.
Una pulseada abierta
La votación dejó en evidencia el frágil equilibrio político en el Congreso y el difícil camino de la oposición para frenar el ajuste impulsado por Milei. Aunque el Gobierno logró blindar el veto con apenas un tercio de la Cámara, el tema dejó abierta una herida política y anticipa nuevas batallas legislativas en torno al rumbo económico y social del país.
La pulseada por los haberes jubilatorios se transformó en un símbolo: de un lado, quienes denuncian la pérdida del poder adquisitivo de los adultos mayores; del otro, quienes defienden la necesidad de priorizar el equilibrio fiscal.
