Madre apela ante el Superior Tribunal de Justicia: “Mi hija tiene derecho a ser escuchada, su vida importa”
- La Pampa
- 11 oct
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Una madre de Rancul, Yanel Buffa, continúa una lucha judicial que ya lleva varios años por la custodia de su hija de 10 años. Días atrás, presentó una apelación ante la Sala A del Superior Tribunal de Justicia de La Pampa, presidida por José Sappa, con el objetivo de revertir un fallo que —según asegura— “desconoce la voz de la niña y pone en riesgo su estabilidad emocional y su integridad”.
El caso tuvo su punto de inflexión en abril de este año, cuando el Juzgado 2 de Familia, Niñas, Niños y Adolescentes de General Pico, a cargo de la jueza Alejandra Campos, dispuso que la niña debía vivir con su padre, residente en la provincia de Córdoba, quien, según la madre, posee antecedentes de violencia y una restricción perimetral vigente.
“Mi pedido es sencillo y humano: que se ponga en el centro a la niña, que se escuche su voz. Mi hija tiene derecho a crecer en un entorno sano, a sentirse segura, a no ser obligada a convivir con alguien a quien no quiere ver. Tiene derecho a ser escuchada, porque su voz vale y su vida importa”, expresó Yanel en diálogo con LA ARENA.
Una apelación con esperanza
La mujer explicó que la apelación presentada busca que el Superior Tribunal revise un proceso que, a su entender, vulnera derechos fundamentales de la niña. “Ojalá esta vez podamos llegar al corazón de quienes deben decidir, porque la Justicia será justa si escucha a quienes más la necesitan, como nuestros hijos e hijas”, manifestó con esperanza.
Actualmente, la menor vive una situación que su madre define como “una contradicción judicial”, ya que el fallo otorgó el cuidado personal unilateral al padre, quien “vive a casi 300 kilómetros, cumple con una cuota alimentaria por debajo de la mínima —menos de $150.000— y no participa activamente de la vida cotidiana de la niña”.
La Cámara de Apelaciones en lo Civil, Comercial, Laboral y de Minería de General Pico, integrada por Mariano Carlos Martín y Roberto Ibáñez, ratificó el 12 de septiembre la resolución de primera instancia, confirmando la tenencia paterna. Esta decisión, según Yanel, ignora antecedentes judiciales de violencia y desoye los deseos expresos de la menor, que “no quiere convivir con su progenitor ni mantener contacto con él”.
“Como madre, me duele en el alma ver cómo se desoye su voz y se la expone a una situación que atenta contra su bienestar emocional y su seguridad”, lamentó Buffa. “Todo esto fue corroborado por las declaraciones testimoniales dentro de la causa”, añadió.
Acompañamiento institucional
En medio de este complejo panorama, Yanel agradeció la visita del defensor de Niñez, Juan Pablo Meaca, quien viajó junto a su equipo a Rancul en el marco de un expediente de revinculación entre la niña y su padre. “Más allá de lo que resulte de ese proceso y de mi deseo como mamá, agradezco la predisposición y la cercanía del equipo que vino hasta nuestra localidad para escucharnos”, valoró.
Asimismo, la mujer afirmó que hace más de seis años que no logra “maternar en paz” y que incluso radicó denuncias penales en la Fiscalía de General Pico contra algunas profesionales que intervinieron en el proceso psicológico de la menor, cuestionando la veracidad de sus informes.
“No quiero que se repita el caso Lucio”
Con evidente angustia, Yanel cerró su testimonio con un mensaje cargado de preocupación y amor maternal: “No quiero que se repita el caso Lucio. Pido que se escuche a mi hija, que se la proteja, porque su bienestar y su voz deben ser prioridad. Las decisiones judiciales no pueden ignorar el derecho de los niños y niñas a ser oídos”.
La apelación presentada ante el Superior Tribunal de Justicia busca, en definitiva, revisar un fallo que, para la madre, contradice el principio del interés superior del niño y expone a su hija a una situación que podría afectar gravemente su desarrollo emocional.
La resolución que adopte el máximo tribunal pampeano será clave no solo para el futuro de esta niña, sino también como precedente en materia de protección integral de derechos de la infancia y de escucha efectiva en los procesos judiciales de familia.
